Desde mi primer contacto con San Juan de la Maguana —en febrero de 1979, hace más de 35 años— siempre he sentido por esa ciudad sureña de mi país un afecto muy especial, parecido al amor que albergamos en nuestro fuero interior por la patria chica en la que nuestros ojos vieron por primera vez el mundo; parecido al amor que produce en nosotros la nostalgia en la lejanía cuando la recordamos.
Y es por eso que nada de lo que atañe a San Juan de la Maguana me es ajeno. Jamás lo será. Ese amor provocó en mi el deseo de hurgar en su pasado literario —recuerdo que fue hace ya más de 10 años, animado por mi gran amigo Edgar Valenzuela—, en los laberintos de su historia literaria, y el resultado fue dejar establecido que su primer dramaturgo lo fue el no aun valorado Ulises Heureaux, hijo (1876-1938), quien también es un exquisito narrador, autor de novelas y cuentos de indudable calidad literaria que todavía esperan la mano de un editor que los reúna en un volumen. A Heureaux, hijo le he dedicado un capítulo en mi reciente obra "En torno a la literatura dominicana: (Apuntes literarios, bibliogróficos y culturales)”, publicada el pasado año por el Banco Central de la República Dominicana.
Todo lo anterior está motivado en la aparición, bajo el sello de la Editora Nacional del Ministerio de Cultura de Rep. Dom., de la antología “Voces desatadas: antología del cuento sanjuanero”, la cual será formalmente puesta en circulación en la anunciada X Feria Regional del Libro Peravia 2014. Los antólogos, dos meritísimos sanjuaneros, son José Enrique Méndez (Ike) y Sobiesky de León, responsables, también, de otra antología sanjuanera que reúne exclusivamente a cultores de las letras sanjuaneras dentro del género poético: "Voces desatadas: antología de poetas sanjuaneros" (2012), publicada bajo el auspicio del Recinto Urania Montás del Instituto Superior de Formación Docente Salomé Ureña, de San Juan de la Maguana
¡Enhorabuena, hermanos sanjuaneros de la palabra escrita, de esa que perpetúa a los pueblos en la memoria de la Historia! ¡Felicidades, amigos Ike y Sobiesky! Les deseamos y auguramos más éxitos, pues ya son muchos los acumulados por ustedes en su larga trayectoria de hacedores y difusores de la cultura sanjuanera. Vuela mi abrazo afectuoso hacia ustedes.
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